El corralito bancario está afectando al poderoso sector naviero chipriota, uno de los pilares de su economía. Varias empresas no pueden hacer frente al pago de salarios de sus tripulaciones y algunos barcos están retenidos en El Pireo hasta que abonen las tarifas portuarias.
Puerto del Pireous.
“A un barco no se le puede decir que se quede parado en medio del océano y que espere a ver qué pasa”, se queja Evgeny Gaponenko, gerente de negocios del buque Elysion “Para nosotros no se trata solo de la pérdida de dinero, o de lo que decidan el Gobierno o la Unión Europea, para nosotros es un problema de negocio”.
Chipre es un país volcado hacia el mar. A pesar de su pequeño tamaño, está entre los cinco Estados con mayor número de compañías navieras en todo el mundo. El sector le aporta el 5% del producto interior bruto anual.
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